Vulnerables
“Si ustedes piensan que están firmes, tengan cuidado de no caer.”
1 Corintios 10:12 (Nueva Traducción Viviente)
Estoy
seguro que nuestra intención cada día es la de agradar a Dios, no me cabe en mi
mente la idea que nos levantemos con la intención de ir y desagradar lo más que
podamos al Señor, ¡No!, la mayoría de nosotros, aunque nos cuesta mucho,
tratamos la manera de estar bien con Dios, de agradarle, de hacer lo correcto,
de vivir una vida sana, tratándonos de apartar del mal.
Pero
a veces se nos olvida que esa intención no solo puede ser por periodos o días,
y digo esto porque la mayoría aunque tratamos, no somos constantes en nuestra
intención diaria de agradar a Dios, a veces pareciera como que nos cansamos de
agradarlo, de hacer las cosas buenas y de pronto despierta en nosotros ese
viejo hombre, ese que esta viciado con las cosas de la carne y el mundo y trata
de seducirnos a hacer lo que realmente dentro de nuestro espíritu no
quisiéramos hacer.
Piensa
por un momento lo siguiente: ¿Cuáles fueron
las veces que te sentiste más tentado a fallarle a Dios?, estoy seguro que
la mayoría de esas veces fueron cuando estuviste solo, cuando no tenias nada
que hacer, cuando por alguna situación te sentiste triste o solitario, cuando
sentiste que no le importabas a la gente o cuando pensaste que no eras lo
suficiente digno como para ser hijo de Dios.
Me
he dado cuenta que soy mas vulnerable cuando hago totalmente lo contrario a lo
que quisiera hacer, me he dado cuenta que soy mas vulnerable cuando dedico mis
pensamientos a cosas que no edifican, cuando traigo a mi mente recuerdos del
pasado o cuando me siento solo y no tengo nada que hacer, cuando por alguna
razón mi estado de animo decae o cuando pienso que no soy lo suficientemente
bueno como para estar cerca de Dios.
Estoy
seguro que te identificas, estoy seguro que tú también eres vulnerable cuando
cosas como esas suceden. Cuando por alguna razón tuviste una discusión y te
encontraste solo pensando tantas cosas que lejos de edificarte comenzaron a
seducirte para ir tras el pecado.
Hay
una cosa que debemos entender y es que a pesar que muchas veces nos creemos muy
fuertes, muy espirituales, muy constantes, debemos de demostrarlo, no solo en
los momentos de bonanza que es fácil demostrarlo, sino en esos momentos en
donde tus sentimientos se alborotan y lo primero que viene a tu mente es ir y
fallarle a Dios.
Tenemos
que entender que somos vulnerables, que cualquier descuido que tengamos nos
querrá seducir rápidamente a ir a hacer lo que realmente no queremos hacer.
¿En
algún momento te has encontrado haciendo algo que no querías hacer?, sí, hablo
de esas veces donde pareciera que por instinto haces algo que no tenias pensado
hacer y de pronto te das cuenta que estas en el lugar equivocado, quizá con las
personas equivocadas, hablando cosas equivocadas o haciendo algo que realmente
no estaba en tus planes y que tú sabes que no son del agrado de Dios.
Hoy
quiero que juntos decidamos buscar al Señor, quiero que comprendamos lo VULNERABLES que somos, que comprendamos
que seguimos siendo humanos imperfectos seducidos por el mal, pero que a pesar
de ello nuestra intención de agradar a Dios es mucho mas fuerte que cualquier
cosa que quiera llevarnos a desagradar a Dios.
¡Volvámonos
a Dios!, ¿Has estado un poco alejado de Él?, entonces ¿Qué esperas para
restaurar esa relación personal, íntima y diaria con el Señor?
A
veces para estar alejado de Dios no se necesita dejar de ir a la Iglesia, de
servirle o leer la Biblia, a veces a pesar que hacemos todo eso estamos
alejados de Él, porque no lo hacemos con la conciencia pura de la necesidad que
existe de Él en nuestro corazón, sino por una rutina ya bien estructurada.
Estoy
seguro que en tu corazón hay una necesidad sincera de Dios, yo sé que tu
sustento es Él y que no hay nada mas que anheles que agradarlo en todo, por eso
quiero invitarte a que todos los días en tu diario vivir, incluyas a Dios en
todo, que no pase ninguna hora de tu día sin que pienses en Él, que toda tu
vida gire alrededor del Señor, que hagas a Jesús realmente el centro de tu vida
y por quien vives.
Platica
con el Señor, habla con Él, tenlo en cuenta en cada decisión, pídele que te
acompañe a cada lugar donde vayas y si en algún momento quieres ir a un lugar
donde no te gustaría llevar al Señor porque te avergüenza lo que vas a ir a
hacer, entonces que esa sea razón para no ir a ese lugar en donde lo menos que
encontraras será ser agradable a Dios.
¿Sabes?
Todos somos vulnerables, todos somos débiles por naturaleza, pero cuando
decidimos entregarnos al Señor a totalidad, entonces allí comenzamos a ser
fuertes, no por una capacidad humana que tengamos, sino porque Dios hace que
seamos fuerte en Él y con Él, ¡Cuánto necesitamos de su presencia en nuestra
vida!
Comencemos
hoy nuevamente a forjar esa relación intima y diaria con Dios, porque estoy
seguro que Él esta deseoso de estar con nosotros y que lo busquemos.
¡Ve y busca
cada día al Señor y entonces serás menos vulnerable!
“pero Dios me ha contestado: «Mi amor es todo lo que necesitas. Mi
poder se muestra en la debilidad.» Por eso, prefiero sentirme orgulloso de mi
debilidad, para que el poder de Cristo se muestre en mí. Me alegro de ser
débil, de ser insultado y perseguido, y de tener necesidades y dificultades por
ser fiel a Cristo. Pues lo que me hace fuerte es reconocer que soy débil.”
2 Corintios 12:9-10 (Traducción en lenguaje actual)
Autor: Enrique
Monterroza
Escrito el 31 de
Julio de 2012
Escrito originalmente
para www.destellodesugloria.org
Autorizado para
publicarse simultáneamente en: www.devocionaldiario.com - www.enriquemonterroza.com y http://reflexionesydevocionales.blogspot.com
1 Comentarios
Mi Hermano Enrrique gracias por tus consejos muy bonito que Dios todo Poderoso te Bendiga por favor Ore por mi y mi familla tenemos un negocio por favor quiero que ore por ese negocio mi Hermano que Dios te cuide
ResponderEliminarGracias por dedicar un momento de tu tiempo para Comentar este tema, creeme que tu aporte será de mucha Bendición.
EmojiTrata la manera de no desviarte del tema a la hora de comentar. Nos reservamos el derecho a publicar tu comentario.