El cumpleaños más feliz
Era
un 12 de Noviembre de un año en la historia cuando Dios me dio el privilegio de
venir al mundo, un niño normal en una familia humilde que en su adolescencia
conoció a Jesús y se enamoro de Él para siempre.
Hoy
es mi cumpleaños, el noveno cumpleaños que celebro desde que escribo en mis
páginas en Internet, pero uno de los cumpleaños más felices que recuerdo y digo
esto porque estoy en un momento de mi vida que me siento plenamente feliz,
estoy totalmente completo, a pesar de tener dificultades, tribulaciones,
tormentas y muchas otras situaciones que quisieran robarme el gozo, hoy puedo
decir que yo me siento feliz de ser lo que Dios quiso que fuera y de vivir de
la forma que Dios ha querido que viva.
Es
uno de los cumpleaños más felices que recuerdo porque sigo haciendo lo que amo
al lado de las personas que amo, aprecio y respeto.
Hoy
quiero agradecer a Dios por un año más de vida, otro año que pasa y otro que
comienza y en donde me siento cada vez más fuerte para emprender nuevos retos y
nuevos proyectos, en donde solo estoy viendo el principio de mucho que Dios
seguramente tiene preparado para mi, no porque lo merezca, sino porque Él no ha
terminado conmigo.
¡Gloria
a Dios por este nuevo año! ¡Gloria a Dios! por su gracia y por su misericordia
hacia mi vida, sin la cual no estaría escribiendo estás líneas.
Algún
día dentro de muchos años, cuando vuelva a leer esto quiero recordar que este
fue uno de los cumpleaños más felices que pude disfrutar al lado de las
personas que amo, aprecio y respeto.
Gracias
a todos los que diariamente me leen, ustedes me hacen aun más feliz, pues saber
que hay personas que se detienen algunos minutos de su valioso tiempo para
leerme, me hace sentir especial, que Dios bendiga sus vidas en gran manera.
Si
me preguntaran el regalo que quiero para este año seria fácil de contestar:
Deseo que los que no tienen empleo puedan encontrar uno, que las mujeres que no
han podido quedar embarazadas puedan concebir, que las personas con
enfermedades duras puedan sanar, que los que están pasando por depresiones
fuertes puedan sonreír y comenzar a ver la luz en sus vidas, pero sobre todo
que Dios ponga en cada uno de nosotros una pasión tal que cada día al despertar
nuestro único objetivo en la vida sea agradarle.
¡Gracias Dios
por este nuevo año!
Enrique Monterroza
El Salvador, 12 de
Noviembre de 2013
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