A continuación coloca la carta intacta de una hermana llamada Araceli G. me escribió este día.
Hermano Enrique, hoy con un gozo indescriptible, pero sobre todo con un agradecimiento infinito a nuestro Padre Celestial, quiero compartirle mi testimonio, para la honra y gloria de nuestro Dios, a través de nuestro Salvador JesuCristo:En el año 2013 El Señor puso en mi corazón el deseo de orar por un hijo, al principio pensé que se trataba solo de una ilusión personal o de el anhelo que tenía de tener otro bebe, pues El Señor ya me había concedido dos varones y aunque en algún momento quise un tercer bebe, este no llego y deduje que era la voluntad de Dios. A principios del año 2013 en un devocional personal Dios llego a mi vida con esta Palabra: "Más la mujer concibió, y dio a luz un hijo en el año siguiente, en el tiempo que Eliseo le había dicho. Y El Niño creció." 2a de Reyes 4:17,18a , al leer esta palabra lagrimas corrían de mis ojos y pensé: ¿será para mi esta palabra? ¿Se me concederá ese hijo que tanto anhelo? Buscando testimonios para fortalecer mi fe, me encontré con su devocional que era del año 2010, tal cual usted describía la situación, era así como yo lo había vivido, usted decía: "Dios ha visto tus lagrimas......el te va a dar ese hijo que tanto anhelas y que has prometido que le enseñaras sus caminos" luego ese enlace me llevo a otro devocional escrito por usted, donde decía:"Tu, que creías que tu tiempo ya había pasado"....y de nuevo me vuelvo a sentir identificada con sus palabras y confirmó que Dios me estaba prometiendo un hijo. Así paso el tiempo, yo me agarre de esa promesa y leía una y otra y otra vez sus devocionales para fortalecer mi fe, cada vez que veía una mujer embarazada agradecía a Dios en mi interior por mi futuro embarazo, cada vez que veía un bebe o un niño o niña agradecía en mi interior por ese hijo o hija que llegaría a mi vida, declaraba sobre mi vida varios versículos de la escritura que hablan acerca de concebir un hijo y sobre todo el de 2a de Reyes 4, así me mantuve todo éste tiempo. A principios de este año Dios empezó a hablar muy fuerte a mi vida de que el milagro que estaba esperando venia en camino, que ya estaba a la puerta, mi hermano hoy le puedo decir con una gran gratitud, con un gran gozo y con humildad que Dios cumple lo que promete, ¡¡hoy tengo tres meses de embarazo!!. Tal vez usted ni siquiera imagino cuando escribió ese artículo que tantos años después Dios lo iba a usar para bendecir una vida, agradezco a Dios por su vida, por su ministerio y por las oraciones que usted escribió en los devocionales y que han sido de bendición para mi vida y anhelaba el día que pudiera yo mandarle mi testimonio, pero sobre todo agradezco a mi Señor el poder ser objeto de su amor y fidelidad, que este testimonio sirva para que muchas, muchas mujeres creyentes que están a la espera de un hijo, fortalezcan su fe y crean que "Fiel es el que prometió" . Con la bendición del Señor en unos meses le enviare la foto de nuestro bebe y agradezco al Señor porque el cumple lo que promete."Y bienaventurada la que creyó, porque se le cumplirá lo que le fue dicho de parte del Señor" Lucas 1:45 ¡¡Toda la Honra y Gloria a Dios Padre a través de nuestro Señor JesuCristo!!
Hoy quiero dar gloria y honra a Dios por seguir haciendo milagros en la gente que le cree. El mensaje al que la hermana hace referencia y que escribí el 12 de Mayo de 2010 se encuentra en el siguiente link: http://www.enriquemonterroza.com/una-palabra-para-matrimonio.html
Quiero animar a aquellos matrimonios que aun siguen esperando ese milagro a que no se cansen de creer que todavía es posible. Desde acá oro para que Dios pueda obrar en sus vidas y pueda darles la bendición de ser padres, al que cree todo le es posible y cuando depositamos nuestra confianza en Dios, Él honra esa confianza y a su tiempo regala esas bendiciones.
¡No te canses de creer, Dios tiene la última palabra!
Enrique Monterroza
15 de Abril de 2015
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