Rendirse a Dios
A
veces hay cosas que queremos cambiar, pero por alguna razón sentimos que no
podemos aunque lo intentemos. Hablo de esas cosas que sabemos que están mal
pero sin embargo no podes olvidar o no queremos hacerlo; es allí en esos
momento en donde lo que necesitamos es RENDIRNOS
A DIOS.
Cuando
hablo de rendirnos a Dios, me refiero al hecho de reconocer que nosotros solos
no podemos, que ya lo intentamos muchas veces y que no lo logramos, que es
momento de dejarlo de intentar por voluntad propia y permitir que sea Dios
quien nos impulse y nos de la capacidad para hacer su voluntad perfecta.
También
debemos reconocer que muchos de nosotros hemos olvidado las sendas antiguas,
aquellos caminos por los que transitábamos seguros de que estábamos haciendo la
voluntad de Dios, pero que con el transcurrir del tiempo fuimos olvidando y
yéndonos hacia otros lugares, alejándonos del buen camino. La Biblia dice: “Así dijo Jehová: Paraos en los caminos,
y mirad, y preguntad por las sendas antiguas, cuál sea el buen camino, y andad
por él, y hallaréis descanso para vuestra alma. Mas dijeron: No andaremos.”
Jeremías 6:16 (Reina-Valera 1960).
Si
nosotros reedificamos nuestra relación personal con Dios y volvemos al buen
camino para andar en el debemos estar seguros que todo se nos hará más fácil, y
es que con Dios todo es más fácil.
Posiblemente
los últimos días te has sentido triste, sin ánimos, desconsolado, con
pensamientos de mucha tristeza. Quizá has examinado tu vida y la has comparado
con otros tiempos en los que eras realmente feliz y te has dado cuenta de cómo
has cambiado, de cómo te has alejado de esa relación que tenias con Dios o de
ese buen camino que te hacia sentir plenamente feliz en el Señor, más hoy
quiero invitarte a RENDIRTE AL SEÑOR,
a dejar que Él pueda obrar en tu vida, a que dejes de llevarle la contraria, a
que puedas reconocer tú necesidad de Él y con ello puedas permitir que Él obre
en tu vida.
Hoy
quiero invitarte a hacer esta oración conmigo:
“Padre Santo que estas en los cielos, te doy gracias por cada una de
tus bondades y misericordias hacia mi vida. Señor reconozco que mi relación
personal contigo esta deteriorada, porque yo lo he provocado, me he alejado de
ti en pos de mis deseos o decisiones que a la larga me han afectado. Reconozco
que me he alejado del buen camino que un día transitaba confiadamente, hoy
reconozco que no puedo más, que he intentado una y otra vez cambiar pero no he
podido, estoy cansado, débil, sin fuerzas, ya no quiero intentarlo más en mis
propias capacidades, hoy quiero rendirme a ti, quiero que tu seas en mi, dame
la capacidad de salir adelante, dame la fortaleza que necesito, pon en mi una
pasión muy fuerte por ti, que el deseo de mi corazón sea siempre agradarte,
cambia mis pensamientos y coloca los tuyos, transforma mi visión y que vea lo
que tu quieres que vea, levántame con tus manos poderosas, sostenme porque
siento que solo no voy a poder y cuando quiera rendirme recuérdame todo lo que
has hecho por mi y que eso sea la motivación por lo cual me levante cada vez
que tropiece. Hoy ME RINDO A TI, rindo todo mi ser, rindo mis pensamientos, mis
sentimientos, mis planes, todo lo que soy, sé tú en mi, porque siento que ya no
puedo más.
Gracias Señor, gracias porque puedo sentir tu presencia en este momento
en mi vida, gracias porque sé que tu vas a actuar de formas maravillosas en mi
vida, gracias porque sé que tienes cuidado de mi, mil gracias, en el Nombre
Poderoso de Jesús, Amén”.
¡Dios actuará
en tu vida, confía!
Autor: Enrique
Monterroza
Escrito el 10 de
Diciembre de 2012
Escrito originalmente
para www.destellodesugloria.org
Autorizado para
publicarse simultáneamente en: www.devocionaldiario.com - www.enriquemonterroza.com y http://reflexionesydevocionales.blogspot.com
0 Comentarios
Gracias por dedicar un momento de tu tiempo para Comentar este tema, creeme que tu aporte será de mucha Bendición.
EmojiTrata la manera de no desviarte del tema a la hora de comentar. Nos reservamos el derecho a publicar tu comentario.