Los mejores 15 años

Los mejores 15 años

Cada vez que llega el 1 de Febrero para mi es especial y es que fue el 1 de Febrero de 1998 cuando me encontré personalmente con Dios, cuando rendí mi vida a Él y lo acepte como mi Señor y Salvador.

Cada año que celebro un año más al lado del Señor cuento ese hermoso episodio que para mi será inolvidable. Y es que era un jovencito sin rumbo, sin sentido de vida y con una enorme necesidad de Dios.

Todavía recuerdo como si fuese ayer ese día Domingo a las 11:30 am en esa Iglesia en donde Dios me hizo ese llamado personal. Al principio quería resistirme, pero no pude más y es que cuando Dios llama, aunque queramos resistirnos no podremos, terminaremos cediendo a su llamado.

Cada paso que daba hacia ese altar era un paso más para que mi vida fuese transformada. Recuerdo muy claramente llegar a ese altar, pararme allí y llorar como un niño, jamás volví a llorar de la forma que lo hice ese día. Me arrepentí de todos mis pecados y luego de pedir perdón de mi boca solo salían las palabras: “Quiero servirte, quiero servirte” y Dios lo tomo muy en serio.

Hoy a 15 años de ese suceso soy un hombre totalmente feliz, con una familia espectacular, casado con la mujer mas bella que Dios me podría haber dado, mi esposa Yamita, con dos hijos hermosísimos, Uziel de ahora cuatro años y siete meses y Valentina de un año y siete meses.

Hoy a 15 años de ese suceso puedo ver como Dios ha sido Bueno en todo sentido, cómo aquel joven sin sentido se convirtió en un hombre que trata de guiar a muchos que se encuentran sin rumbo en la vida.

No soy perfecto ni mucho menos lo pretendo ser, pero si hay algo de lo que Dios siempre estará seguro de mi es que lo amo y a pesar de mis errores trato cada día de mejorar y no estancarme. Durante 15 años de mi vida he podido ver como Dios me ha sostenido, he podido ver como Él ha tenido misericordia de mi y me ha llevado más allá de lo que considero merecer, sin embargo Él ha visto algo útil en mi para Él y para su obra y ha tenido a bien permitirme servirle.

Este día especial para mi, solo quiero declarar como lo hago cada día que Dios ha sido Bueno y que sin Él nada de lo que hiciera tuviera sentido. Él le dio sentido a mi vida, la pinto con colores hermosos, dibujo una sonrisa en mi rostro, edifico en mi vida cosas que jamás imagine tener o merecer, y a pesar de mis constantes equivocaciones, siempre ha extendido su mano para no dejarme en el suelo. Hoy solo puedo decir que han sido los mejores 15 años de mi vida y lo mejor que han sido junto a Él.

¡Gracias Dios por darme más de lo que creo merecer, por ser más Bueno y Fiel!

¡Toda Gloria, Honra y Alabanza por todo lo bueno que he hecho o a ocurrido en estos años sea para Dios! ¡Él es el Artífice de TODO!

Enrique Monterroza

El Salvador, 1 de febrero de 2013

www.enriquemonterroza.com